Hipnosis para la ansiedad: Técnicas de relajación para calmar la mente, superar los ataques de pánico y detener la depresión, para lograr un cambio significativo en la vida

Sufrir de ansiedad es algo horripilante. Te sientes perdido y sofocado por la angustia la mayor parte del tiempo, no puedes disfrutar del presente, pensando repetidamente en hechos del pasado que te dañaron o en sucesos futuros que estás seguro te van a volver a lastimar. Podrá parecer un lugar común, un cliché, pero muchas veces al sufrir de ansiedad solo se desea encerrarse en un rincón de la habitación y olvidarse del mundo que nos rodea. Si estás harto de sufrir ansiedad y estás desesperado por poder librarte de ella, pues está paralizando tu vida, drenando tu energía y casi está provocando que pierdas la cabeza, estás en el sitio correcto. En Hipnosis para la ansiedad encontrarás herramientas para: - Dar batalla a la depresión. - Conquistar el fracaso. - Poner fin a los ataques de pánico. - Disfrutar de lugares repletos de personas. - Adoptar una crianza positiva. La solución que se propone para la ansiedad es la hipnosis. Como todo empieza en el cerebro, tiene que terminar en el mismo órgano. La ansiedad es la respuesta automática inconsciente que nuestro cerebro produce ante el miedo que invade nuestro pensamiento, ya sea porque recordamos lo mal que nos hemos sentido, o porque imaginamos todo lo malo que nos puede ocurrir dentro de poco tiempo. Sufrir ansiedad es estar atorado en un bucle obsesivo, que no tiene piedad con nosotros, que nos dice que aquello a lo que tenemos se va a volver real. La intención es que por medio de la hipnosis tú y solo tú puedas controlar la manera en que piensas, siendo capaz de guiar tus propios pensamientos, sentimientos y comportamientos. Se trata de que logres entrar deliberadamente a un estado hipnótico que te permite deshacerte de la ansiedad a la cual te enfrentas en un estado consciente, logrando que tu cerebro sea capaz de descansar de las ideas obsesivas, catastróficas, pesimistas y destructivas que lo invaden la mayoría del tiempo y que reciben el nombre de ansiedad.