La tribu de Cecilia

(Previamente, Contracorriente: escenas de poliamor) Cecilia, Julio y Laura se enfrentan a los problemas de vivir como un trío. Laura es lesbiana y está enamorada de Cecilia, quien se ha vuelto bisexual para corresponderle. Cecilia y Julio han tenido problemas que Laura ha sabido solucionar. Julio está en una posición envidiable, viviendo con los dos amores de su vida. Pero los tres se adentran por terreno inexplorado. Hoy en día lo llamamos poliamor, pero estamos en 1979. La sociedad que no está dispuesta a aceptar la homosexualidad, y mucho menos ese tipo de relaciones en grupo. Dicen estar casados los tres, pero sólo Julio y Laura lo están oficialmente. ¿Conseguirá la represión social borrar a Cecilia de esa relación? Fantasmas del pasado se ciernen sobre la incipiente democracia española. Cecilia abre una caja de Pandora de la Guerra Civil que amenaza al matrimonio de sus padres y, por extensión, a ella. A los tres les gusta la dominación-sumisión. Cecilia es sumisa, pero su pasado la lleva a rebelarse contra los que la quieren controlar. Quiere volver a trabajar en una barra americana regentada por su amigo y consejero "el Chino". ¿Qué harán Julio y Laura? Otros personajes quieren tener relaciones con ellos. Johnny, un financiero de Wall Street, sedujo a Cecilia en el pasado y ahora ha puesto sus miras en Laura. Lorenzo, mecánico comunista, y Malena, refugiada chilena, se enamoraron de Cecilia cuando vivía con ellos y no están dispuestos a olvidarla. ¿Será el trío una relación cerrada? ¿O se convertirá en una tribu? El poliamor surge de los movimientos de liberación sexual, feminista y gay de los años 60 y 70, y se basa en que mujeres y hombres gozan de la misma libertad para relacionarse con personas del mismo o distinto sexo. La formación del trío entre Cecilia, Laura y Julio fue un proceso largo y difícil, a veces doloroso, que describo en las tres novelas anteriores de la saga “La revolución erótica de Cecilia Madrigal”. Pero en el poliamor no existe el “y fueron felices y comieron perdices”. La vida diaria es un reto continuo debido a la falta de aceptación por la sociedad y los problemas que presentan la comunicación y la toma de decisiones entre tres personas.